Microsoft ha confirmado un fallo en Windows 11 que hace que el explorador de archivos tenga un consumo excesivo de la CPU, y que vincula a la actualización que lanzó el mes de mayo.
La compañía tecnológica está trabajando en un fallo que se ha detectado después de instalar la actualización acumulativa del 9 de mayo (KB5026372), u otra posterior, que espera haber resuelto a finales del presente mes.
Se trata de un problema que afecta al explorador de archivos. Según explica Microsoft en su blog, los usuarios que itnentan comprobar los permisos de acceso pueden no ver la opción de ‘Acceso efectivo’, dentro de las opciones avanzadas de seguridad en el menú de Propiedades de un archivo o carpeta compartidos.
Sin embargo, aquellos usuarios que sí lo ven, al seleccionarlo pueden no obtener una lista de resultados y seguir experimentado un consumo de la CPU incluso cuando el diálogo de las opciones avanzadas de seguridad ya ha sido cerrado.
La compañía tecnológica matiza que no es probable que este problema afecte a usuarios que usan dispositivos Windows en sus casas, y ha señalado que, mientras llega la corrección, se puede mitigar el consumo de CPU con solo reiniciar el dispositivo o cerrando la sesión del usuario afectado.
Este fallo se ha identificado en Windows 11, en las versiones 22H2 y 21H2, y en Windows Server 2022.
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