Final Fantasy VII Rebirth ofrecerá a los jugadores un mapa de mundo abierto para explorar que contará con ciudades nuevas que no aparecían en la entrega original, así como nuevas misiones secundarias y minijuegos.
Rebirth es el segundo capítulo del ‘remake’ de Final Fantasy VII. Llegará a PlayStation el próximo 29 de febrero, continuando la historia justo donde la dejó el primer capítulo, con Cloud y sus amigos ya fuera de Midgar, que inician una misión para detener a Sefirot, quien busca recuperar y dominar el planeta junto a Jénova.
Esta nueva entrega apuesta por la exploración, para lo que ofrecerá un mapa de mundo abierto que permitirá a los jugadores conocer nuevas regiones y poblaciones, incluso ciudades que no existían en el juego original, como ha confirmado el director del videojuego, Naoki Hamaguchi, en una entrevista concedida a Game Informer.
“En Rebirth, hemos añadido este tipo de ciudades como el Nido del Cuervo, ciudades totalmente nuevas que no existían en el original para profundizar y crear toda esta visión del mundo de Rebirth”, ha comentado.
Junto a estos nuevos emplazamientos, también se han introducido misiones secundarias, en las que el resto de personajes del grupo adquieren relevancia para ayudar a completarlas, lo que ayuda a profundizar en la relación que tienen con Cloud.
Una de esas misiones, por ejemplo, insta a acudir a un faro cercano donde una mercenaria, Kyrie, intenta que su negocio prospere, pero antes tiene que resolver un problema con los monstruos. También hay minijuegos, como una competición regional de un juego de cartas estratégico y una prueba de composición musical.
El estudio de desarrollo Square Enix ha confirmado recientemente que Rebirth incorporará novedades en los combates, que permiten a una pareja de personajes desplegar habilidades de forma conjunta, y en la exploración, con la posibilidad de encontrar nuevos artefactos en las misiones secundarias y de equipar y personalizar a los chocobos.
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