Google ha anunciado una nueva actualización para Bard, que desde este jueves está disponible en España y en más de 40 países de todo el mundo e introduce características como la posibilidad de agregar imágenes a las consultas o ajustar la extensión de sus respuestas.

La compañía ha dado a conocer estas nuevas funcionalidades tras unos meses de trabajo en su ‘chatbot’, que lo planta como una herramienta dispuesta a ayudar a los usuarios “a dar rienda suelta a su imaginación” y “poner en marcha sus ideas”.

En esto último ha insistido especialmente el Senior Product Director de Google y uno de los líderes de Bard, Jack Krawczyk, que ha dicho que la misión de este servicio de Google es la de no solo dar respuestas a las preguntas de los usuarios, sino también “ayudarles a desarrollarlas.

“Creemos que Bard es una herramienta para ampliar las capacidades del cerebro humano en torno a la creatividad”, ha comentado el directivo en la presentación de esta actualización, a la que ha asistido Europa Press.

Krawczyk ha añadido que su equipo ha trabajado e “invertido mucho en conocer cómo puede funcionar Bard en múltiples lenguas”, lo que sugiere que la integración de los más de 40 idiomas que ahora soporta ha sido una de las prioridades de la empresa.

Por tanto, a partir de este jueves, los usuarios pueden escuchar las respuestas de Bard en lenguas como el español, el árabe, el chino, el alemán o el hindi. Asimismo, este servicio de Google se ha ampliado a más lugares del mundo, esto es, en toda Europa y Brasil.

Otra de las grandes novedades de esta actualición está relacionada con el uso de imágenes en los mensajes, una capacidad que ya se anunció en Google I/O, cuando Google adelantó que estaba adaptando a Bard las capacidades de Google Lens.

De esa manera, si se desea más información sobre una imagen o se necesita inspiración para escribir un texto asociado a una imagen, se pueden cargar imágenes con peticiones y Bard se encargará de analizar la imagen para ofrecer la respuesta buscada.

Gracias a esta función, que por el momento está disponible en inglés, se puede escanear la imagen de un vino con su etiqueta y Bard se encargará de comentar cómo se ha fabricado o con qué platos puede maridar mejor.

La compañía también ha comentado que ha añadido nuevas formas de anclar y renombrar las conversaciones con Bard. De ese modo, al iniciar una conversación, se podrán ver las opciones de ‘anclar, renombrar y retromar’ conversaciones recientes en la barra lateral.

Con esta actualización, los usuarios también podrán exportar código de Python a Replit, así como a Google Colab, así como compartir respuestas con amigos; herramienta, por cierto, que también está disponible en más de 40 idiomas.

ESCUCHAR Y AJUSTAR LAS RESPUESTAS DE BARD

Google también ha anunciado el lanzamiento de nuevas actualizaciones para que las respuestas de Bard se adapten mejor a las necesidades de los usuarios, con una funcionalidad que permite a los usuarios escuchar las respuestas del ‘chatbot’.

La compañía considera que esta función “resulta especialmente útil” cuando los usuarios deseen escuchar cómo se pronuncia correctamente una palabra o bien para oído un poema o un texto. Solo es necesario introducir una pregunta y seleccionar el icono de sonido para escuchar las respuestas de Bard.

Por otra parte, Bard ahora presenta cinco opciones diferentes para cambiar el tono y el estilo de sus respuestas: sencillo, largo, corto, profesional o informal. Por el momento, esta última característica está disponible en inglés, aunque se implementará en otros idiomas próximamente.

PRIVACIDAD

La compañía ha matizado que ha tomado medidas para gestionar la información de los usuarios de manera responsable. Esto se debe a que cuando interactúan con Bard, Google recopila datos como conversaciones, ubicación, comentarios e información de uso para ayudarle a proveer, mejorar y desarrollar sus productos, servicios y tecnologías de aprendizaje automático (‘machine learning’).

Por otra parte, Google ha recordado que se trata de “una tecnología experimental” que puede realizar en ocasiones declaraciones “inexactas” en respuesta a las preguntas de los usuarios. Por ello, existe un formulario para hacer llegar comentarios o apreciaciones en caso de no obtener los resultados esperados.

Finalmente, ha recordado que también es posible elegir el tiempo que se desea que Bard almacene los datos en las cuentas de Google. De forma predeterminada, Google guarda la actividad de Bard en ellas durante un máximo de 18 meses, aunque también se puede cambiar a tres o 36 meses.

CÓMO USAR BARD

Para utilizar Bard, se debe acceder a la URL bard.google.com desde el ordenador o el dispositivo móvil y, una vez dentro, se puede o bien escribir el mensaje o bien utilizar el micrófono para introducir la voz.

Google ha recordado que al usar Bard, los usuarios tendrán la opción de elegir entre varias respuestas “a menudo”, que las encontrarán en la esquina superior derecha, en el apartado ‘Ver otros borradores’.

A la vez que se utiliza Bard, se puede hacer clic en Gogole para obtener sugerencias de consultas relevantes. A continuación, la Búsqueda se abrirá en una nueva pestaña, en la que se podrán encontrar resultados y profundizar en ellos.

Debido a que este ‘chatbot’ aún es un experimento en fase inicial, en constante mejora, los usuarios pueden opinar sobre una respuesta, puntuándola con un pulgar hacia arriba o hacia abajo, así como explicar por qué se ha indicado que esa respuesta no cumple con los requisitos.